jueves, abril 21, 2011

Retazos

"El coqueteo se había vuelto habitual entre ellos, pero era evidente que aquello no había llegado a nada más dado que no habían podido verse en un rato. 


Pero él quería ese "más". A pesar de saber que apresurar las cosas no era buena idea, él quería más que eso. Su cabeza no dejaba de recrear aquellos escenarios que le parecían perfectos, donde se encontraban cerca el uno del otro y solo importaban ellos. Había muchas cosas en su imaginación, pero él solo quería algo en ése mismo momento.


Había esperado toda la semana para verlo, y aquellos deseos solo crecieron y crecieron en ése tiempo... Ahora que estaban juntos, sin embargo, se comportaban como siempre lo habían hecho. Y aquello no le era suficiente.


"Quisiera besarte" musitó interrumpiendo el dialogo animado del otro. Un comentario inocente. Solo un pensamiento que no había podido callar después de pensar tanto en ello.


El otro enmudeció al instante. Lo miró fijamente, como esperando ver diversión o galantería en aquellos ojos, pero estos ni siquiera le devolvían la mirada. Mantenía la vista baja, y su rostro lucía una expresión tímida por haberse expresado sin medir sus palabras. Hubiera preferido no decir eso en voz alta, pero sus impulsos le habían ganado.


"¿De verdad?" preguntó el mas alto, usando un tono de curiosidad que se transformó en uno bromista "¿Aunque estemos en público y todos nuestros amigos acaben enterándose?"


Soltó una risa fresca que incluso sonó contagiosa, pero lejos de reírse, su acompañante le miró en silencio, cualquier sonrisa disponible fuera de la vista.


"No lo sé. Yo solo quiero besarte."  murmuró.


La risa se asfixió al instante al igual que su sonrisa. Ambas miradas se cruzaron finalmente, y los dos permanecieron en silencio. Uno avergonzado y deseando desaparecer, el otro sorprendido y sin saber qué contestar.


Pasaron un par de segundos más y de repente ambos se acercaron para besarse. 


Inesperado, pero dulce. Fuerte, pero lento. Y ya no importó nada. Si los demás se enteraban, si el drama empezaba a raíz de aquello. Aquél beso se sentía bien, estar juntos se sentía bien. 


Finalmente él, por una vez, decidió olvidarse del bienestar del mundo y recordar darle importancia a su propio bienestar."

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